Para los seguidores del Inti, quien ha sido definido por sus propios compañeros como el "mejor", Max Berrú Carrión representa una voz inconfundible dentro de la historia del grupo.
Pero Max es mucho más que una hermosa voz.
Max encarna en compromiso con los ideales, con los principios. Max representa la coherencia, el equilibrio y la sensatez ante los momentos aciagos que conocemos.
Max es la sencillez misma, que lo eleva a lo más alto de la consideración que todos por el tenemos.
Hoy, luego de superar su tropiezo con una neumonía, Max nos regala sus palabras en esta entrevista inédita.
A continuación leeremos la historia de Max, sus sueños, sus proyectos, sus opiniones.
Para nosotros en un tremendo orgullo, presentar para todos ustedes esta entrevista.
A continuación, Max Berrú.
EUI: Max, cuéntanos algo de tu Cariamanga natal, ¿Como es la relación con la música en tu infancia?
Max: Cariamanga, es un pequeño pueblo perdido en las montañas del sur del Ecuador, cuando nací el 5 de junio de 1942 éramos poco más de dos mil habitantes, no teníamos luz eléctrica , ni agua potable ni carretera que nos comunicara con otra ciudad o pueblo, los traslados de personas o mercaderías se hacían a lomo de mula, no llegaban los periódicos y nos enterábamos del mundo a través de la radio a pilas y de vez en cuando mi padre nos traía de sus viajes revistas para niños, nos contaba como eran las ciudades, los aviones y los carros. Recuerdo, cuando inauguraron la carretera, yo tenía ocho años, casi todo el pueblo estaba en la plaza central esperando que llegara el primer carro y escuchábamos desde lejos los rugidos del motor hasta que apareció en la recta final que llegaba a esta plaza, eran las seis de la tarde cuando en Ecuador empieza a oscurecer, cuando faltaban diez metros para llegar, el chofer prendió las luces y quedó la tendalada, muchos nos tiramos al suelo para que esos rayos no nos hicieran daño, otros corrieron desesperados y solo unos pocos que conocían estos aparatos esperaron que bajaran las autoridades y por supuesto mi abuelo Napoleón Berrú que era el alcalde los recibió e improvisó un discurso, cortó la cinta y pidió al chofer que les diera una vuelta a todos y empezara por los niños.
Nuestros juegos eran simples pero con mucha imaginación especialmente para contar cuentos, para hacer representaciones teatrales que inventábamos, como en cada casa había una guitarra, organizábamos festivales, hasta creamos un circo.
Yo canto desde que tengo uso de razón, mi padre, con su guitarra y su canto sembró en mi corazón la semilla de amor por la música folclórica y popular de América Latina, mi abuela paterna cantaba y se acompañaba con su vihuela. Mi madre cantaba mientras realizaba sus actividades domésticas. Recuerdo las serenatas que le daban a mi papá para el día de su santo, esa noche me quedaba despierto y disfrutaba desde mi cama haciendo la segunda voz que me salía en forma espontanea. En la Escuela de los Hermanos Cristianos donde hice la primaria canté en todas las veladas artísticas y cuando estaba en la ciudad de Loja haciendo el primer curso de secundaria, formé con dos compañeros el Trío “Berrú, Carrión y Gonzalez” con guitarra, acordeón y maracas interpretábamos boleros y música mexicana que aprendimos de las películas que llegaban con actores y cantantes como Jorge Negrete, Pedro Infante, Luis Aguilar, Miguel Aceves Mejía etc. Yo era bueno para los falsetes y mas tarde en Quito donde terminé la secundaria gané algunos concursos en programas de radio principalmente por estos falsetes. En Quito , daba serenatas con un primo, a nuestras pololas o a la de nuestros amigos.
EUI: Tu llegada a Chile se produce por tu interés en ver el Mundial de Fútbol del año 1962. ¿Que te motivo a quedarte en Chile, y a dejar a tu patria a tan temprana edad?
Max: Siempre fui muy deportista, pero a los quince años entre a jugar en las divisiones menores de Liga Deportiva Universitaria, quería ser futbolista, a fines del 61 salimos campeones en los campeonatos Juvenil, De reserva y Profesional, yo jugué el de Reserva y nos dieron un pequeño premio en dinero con este premio le dije a mi padre que quería ir a ver el Mundial de Fútbol en Chile que se jugaba en junio de 1962, aprovechando que en Santiago vivía un primo que me alojaría, luego del mundial me fui quedando por que encontré que la gente de clase media era muy cariñosa, siempre tenía invitaciones a fiestas y asados, a los pocos días de llegado empecé a pololear con una vecina y fui postergando mi regreso, empecé a jugar fútbol en una Liga de barrio y lo estaba pasando muy bien, pienso que en ese tiempo era un privilegio ser extranjero en Chile y cuando me informé que la universidad era gratuita, decidí estudiar en la Escuela de Artes de Oficios que pertenecía a la Universidad Técnica del Estado y me matriculé en la carrera de Ingeniería Mecánica, con los 80 dólares que me mandaba mi padre lo pasaba muy bien por que con 50 pagaba la pensión y la comida y el resto era para divertirme, hasta me alcanzó para comprarme un auto usado que le decían “La Paila” por que mujer que subía estaba frita ja ja ja , eso decían mis amigos para lesearme.
EUI: Estando ya radicado en Chile ¿Cómo surge tu interés por la música?. Leí por ahí, que en esos años de juventud, incluso cantaban serenatas, para ganar algo de dinero.
Max: El interés por la música la tuve siempre, en la Escuela de Artes y Oficios teníamos una Peña Folclórica y yo cantaba con Jorge Coulón con quien formé el Duo “Huayrapamushka” que en quechua significa hijos del viento, Con Jorge dábamos serenatas después de media noche, pero siempre llegaban los pacos para hacernos callar y más de alguna vez nos llevaron detenidos, lo hacíamos por gusto y para ganarnos unos pesitos que nunca estaban demás, después formamos un cuarteto que se llamó “Los Nubarrones” en el que participó Willy Oddó que después pasó a formar parte del Quilapayún, luego Jorge Coulón me invitó a formar parte de un conjunto que no tenía nombre y que el guitarrista Eulogio Dávalos, que era hijo de bolivianos nos invitó a su casa para festejar el día de Bolivia y nos bautizó como INTI ILLIMANI
Nota: Luis Cifuentes gentilmente nos señala que "En verdad fueron las hijas de Dávalos y fue Jorge quien primero pronunció el nombre Inti-Illimani, pero la atribución a Eulogio parece estar demasiado establecida"
EUI: ¿Cómo se produce tu identificación con el proyecto de Salvador Allende en 1970?
Max: Desde pequeño fui muy sensible a los problemas de la gente pobre, en la escuela mis mejores amigos eran los que menos tenían y todo lo que tenía lo compartía con gusto con ellos. Cuando entré a estudiar en la Universidad me nombraron al tiro presidente del curso y el Centro de Alumnos era DC pero la mayoría de mis compañeros de curso eran de izquierda y muchos de ellos eran comunistas, entonces rápidamente me convertí en simpatizante de LA JOTA, luego empecé a leer sobre el Marxismo y a leer literatura rusa, a participar en los trabajos voluntarios, en los Sábados Rojos, iba a las fiestas que organizaban los jotosos y durante las vacaciones de 1965, fui hacer una práctica en la Minas del Carbón en Lota, esta experiencia marcó para siempre mi vida, pude vivir de cerca la explotación a los viejos mineros que ganaban sueldos miserables y se enfermaban de silicosis, bajé muchas veces a las profundidades de la mina y tuve la sensación de que en cualquier momento podía morir, allí supe en lo más profundo de mi ser que tenía que militar en las JJCC y dos años después en una simple pero hermosa ceremonia, Víctor Jara me entregó el carnet de militante y con Inti
Illimani participamos en la Campaña Electoral del compañero Salvador Allende por que representaba los intereses de la clase obrera, por que quería transformar la Sociedad capitalista en Sociedad Socialista.
EUI: ¿Como es el proceso de dejar la ingeniería, para convertirse en músico profesional? ¿Te costo mucho decidirte?
Max: Yo estaba trabajando como Ingeniero de Ejecución en el Instituto de Normalización en Santiago cuando me llama por teléfono la secretaria del Departamento de Extensión y Comunicaciones de la UTE para consultarme si me gustaría ser contratado por la Universidad para dedicarme a la música con el Inti Illimani, yo pensé que era una broma y le respondí: “Tu me estás ofreciendo un sueldo para divertirme”, después de la risa me dijo que estaba preguntando a cada uno de nosotros para hacer los contratos responsablemente. Le dije que le iba a pensar para decidir en conciencia. Por la noche hablé con mi compañera y ella me ayudó a decidir por que la verdad es que no me gustaron los trabajos que tuve como ingeniero mecánico, cuando me gradué me había ido al Ecuador donde estuve dos meses y echaba mucho de menos la actividad musical con el Inti, así que me regresé a Chile y a las pocas semanas ingresé nuevamente al conjunto, entones debo decir que no fue difícil abandonar la Ingeniería para dedicarme solo a la música.
EUI: Tu familia en Ecuador, ¿Comprende la decisión de dejar la ingeniería, por una vida artistica? ¿Como se enteran de la decisión?
Max: Mi familia en Ecuador no estaban de acuerdo con que abandonara la Ingeniería y no comprendía como la cambiaba por el Inti, les comuniqué durante una visita que les hice, les agradecí lo que habían hecho por mi y les obsequié a mis padres el cartón donde dice que soy Ingeniero de Ejecución en Mecánica, recuerdo que les dije que era comunista que mi vida estaba ligada a la vida política del pueblo chileno, que estábamos muy cerca de tener un Presidente socialista, que mi aporte a esta lucha era más interesante como músico etc, cosa que nos los convenció, ellos tenían el prejuicio que la música y el canto estaba aparejado con la bohemia y el trago, pero con el tiempo y con las frecuentes visitas que me hicieron tanto en Chile como en Italia durante el exilio, se dieron cuenta que la vida que yo hacía era tanto o más sana que la que hacían mis hermanos en Ecuador, vieron que el Inti Illimani era un excelente conjunto respetado y querido en todo el mundo y empezaron a admirarme y a sentirse orgullos de mi.
EUI: ¿Que recuerdos tienes del trabajo que realizaron con Víctor Jara?
Max: De Víctor tengo muchos y muy buenos recuerdos, era muy trabajador, estaba siempre creando, era muy observador y tenía gran capacidad para reflejar en sus textos y en su música las observaciones que hacía o las experiencias que vivía. Recuerdo que en el primer festival de la Nueva Canción que organizó Ricardo García, los Inti cantamos como invitados y me encontraba en los pasillos del Estadio Chile en ese entonces cuando me cruzo con Víctor y me invita e escuchar el último ensayo de la canción Plegaria a un labrador interpretada por él y los Quilapayún, fue una experiencia maravillosa, no conocía la canción y su hermosa melodía y maravilloso texto con la fuerza interpretativa de Víctor y los Quila penetraron en lo más profundo de mi ser y terminé llorando convencido que iban a ganar como efectivamente sucedió. Recuerdo que en 1971 fuimos a cantar en Colombia y nos compramos un tiple y cuando regresamos se lo mostramos a Víctor y recuerdo que cuando escuchó sus cuerdas dijo: “ Que hermoso sonido, parece un clavecín” y nos pidió que lo acompañáramos a grabar con el tiple el tema “CHARAGUA” que había creado recién como música de continuidad para la televisión Nacional. Inti Illimani lo acompañó en dos discos larga duración y algunas canciones sueltas, el último trabajo que quedó sin terminar fue la música para el ballet “Los siete Estados” que preparaba Patricio Bunster con música de Víctor y Celso Garrido Lecca, nosotros formábamos parte de los intérpretes, obra que quedó inconclusa. Muchas veces me dio un aventón desde la UTE a mi casa en su renoleta blanca y en una ocasión me contó que tenía que decidir entre el teatro o la música, yo le dije que si el era capaz de crear una canción tan bella como Plegaria de un Labrador tenía que dedicarse al canto por que además llegaba a miles de personas, mientras que las obras de teatro las veía muy poca gente, que su aporte a los cambios y a la lucha de los trabajadores y a la comprensión de la gente del programa del Gobierno de la UP era más efectivo con el canto. Dos días después lo encontré y me dijo garcias por tu opinión, te cuento que renuncié a la dirección del teatro.
EUI: El golpe de estado los sorprende en Roma ¿Como conoces la noticia del derrocamiento del Gobierno de la Unidad Popular, y la muerte del Presidente Salvador Allende? ¿Cuál es tu reacción?
Max: El Golpe de Estado nos sorprende en Roma, nos encontrábamos visitando la Cúpula de San Pietro en el Vaticano y hasta arriba llegó cesando nuestro amigo y compañero italiano José Bóserman para comunicarnos que en Chile había un golpe de Estado. Rápidamente nos fuimos unos al hotel otros a la cede central del PC italiano y seguíamos por televisión las noticias con mucha rabia impotencia y tristeza, especialmente cuando bombardearon la Moneda y anunciaron que Salvador Allende había muerto. Esa misma noche teníamos programado un concierto en un barrio popular de Roma y los compañeros italianos nos dijeron que comprendían nuestro estado anímico y que tenían problemas para suspender el concierto, entonces recordé las palabras del Primero Ministro de Vietnam. Pham Van Dong ( ver si está bien escrito ), cuando visitamos dos semanas antes este heroico país: “ Ustedes como artistas tienen que cuidarse por que si hay un golpe de Estado en Chile van a tener que cantar mucho en las actividades de solidaridad en todo el mundo para recuperar la Democracia” y les dije a mis compañeros que teníamos que empezar esta misma noche a incentivar la solidaridad de la que hablaba el compañero vietnamita. Fue un concierto con llanto y rabia que seguramente marco nuestro compromiso de dedicarnos a la solidaridad con la lucha de nuestro pueblo para derribar a la Junta Militar.
Luis Cifuentes Seves es autor del libro "Fragmentos de un sueño; Inti-Illimani y la generación de los 60" entre muchas otras publicaciones. Formó parte de la formación original del conjunto que dio origen a Inti Illimani.
Hasta aquí la primera parte de la entrevista a Max Berrú.
Pronto la segunda parte.
Un abrazo a todos.
El Unico Inti.
6 comentarios:
la entrevista esta buenísima...la infancia de Max parece sacada de una novela de García Marquez , llena de realismo mágico...me alegro que las vueltas de la vida lo hayan venido a dejar aquí...mil Gracias!! con ansias esperaré la segunda parte!!
Está super interesante la entrevista. me tuvieron metido varios días con el inicio; espero que no se demoren mucho con la segunda parte jejeje
Que estén bien, y sigan así.
Saludos desde Conce.
Hola chicos muy buena la entrevista a Don Max Berru,que interesante es enterase que el deporte lo atrajo y se termino uniendo al canto chileno y nos entrego a tan gran músico.Muchos saludos a todos y me alegro enormemente de la recuperación de Don Max,a cuidarse pues,lo queremos para mucho rato mas.Me despido como siempre y que estén muy bien.chau chau.
muy interesante la entrevista muchachos, pero estamos esperando la parte sabrosa, lo que de verdad queremos saber, apúrense con la segunda parte chicos !
Yo no sé. La parte sabrosa es todo lo que Don Max quiera decir. Sin buscar la pelea ni desencuentros. Lo que quiero ver es cómo una persona busca su camino, cómo lo encuentra,y cómo lo mantiene. Y, ojalá, cómo nos sirve de ejemplo todo aquello.
Tenemos pocos ejemplos de verdad; ojalá que encontremos en el Sr. Berrú, una inspiración para ver, para analizar, para hablar y para contruir.
Grande Max...músico de corazón y voz dulce...
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