viernes, 20 de febrero de 2009

Inti-Illimani en Viña 2004





Hace exactamente 5 años, también un Sábado 21 de Febrero, subía al escenario de la Quinta Vergara por primera vez en su historia Inti-Illimani en el Festival de Viña.
Habrá que decir que para el Inti no fue fácil este romance de verano con el Festival y todo lo que esto implica. La saturación de la farándula ya estaba instalándose en los televisores por lo que subirse a este escenario y convivir con todos y todo era una decisión que debía no sólo meditarse, también discutirse.

Las crónicas de la época dan cuenta de la inédita presentación y de las aspiraciones de los músicos del Inti en su primera vez con el "monstruo"
El resultado de esta primera vez es conocido. Antorchas, Gaviota de oro para Inti-Illimani, el reconocimiento de un público heterogéneo, confirmaba y consolidaba la formación de un grupo que ya venía dando muestras de suficiente madurez, sobre todo ante el voluntario alejamiento de Max Berrú en 1997, de José Seves en 1998 y de Horacio Salinas en 2001.
La dirección musical de Manuel Meriño, la voz de Daniel Cantillana, la versatilidad de El Búho, el "sabor" de Efrén y el virtuosismo de Juan sumados a la experiencia e impronta de Horacio Durán, Marcelo y Jorge Coulón, felizmente hacían presagiar que Inti-Illimani tomaba un nuevo impulso, renovado, fresco, y que así como nos llamaba profundamente la atención, nos tranquilizaba: había Inti-Illimani para mucho rato.
Quienes hemos sido seguidores históricos del Inti (y aquí si el término cobra validez) nos sentíamos felices de ser testigos de esta presentación que vislumbraba un feliz, exitoso y promisorio futuro.



Al poco andar, pocos meses después, Durán posiblemente aún con la resaca del éxito alcanzado, declara su necesidad de descanso, del año sabático en el sur y ofrece mantener su permanencia en el grupo pero tras bambalinas.
El resto acoge la voluntad de Durán y así lo comunican a los seguidores.

Lo que viene de ahí en adelante, es lo que nos motiva en esta tribuna.

¿Qué desmedida ambición, codicia hace que Salinas, Seves y Durán traicionen su propia palabra, su supuesta consecuencia y peor aún, a sus compañeros de toda una vida? ¿Qué suculento (imaginamos que suculento) estímulo es posible ofrecer a Salinas, Seves y Durán para que incluso sean capaces de hacer la vista gorda a sus propias diferencias, algunas que tuvieron como resultado el alejamiento del Inti (por ejemplo el caso de José Seves en 1998)?
¿Quién estuvo y está tras este turbio ardid fraguado meses antes de la presentación en Viña, en las sombras, agazapados en el silencio cobarde y traidor, que hacía llamadas para bajar al Inti de presentaciones, para decir que había "quiebre", que el Inti se terminaba y que se "vendería" todo?.

Honestamente y a la luz de los resultados "estéticos", ¿qué buscaban los ex integrantes de Inti-Illimani al reunirse el 2004, cuando existía el único Inti, buscando resquicios legales para aparecer como una caricatura menor que hasta hoy usa el nombre del grupo provocando la vergüenza de quienes hemos admirado al Inti por su ética y por su estética?.

A Salinas a Seves y a Durán los admiramos por años, desde lejos cuando el exilio y un poco más cerca en sus presentaciones por todo Chile.
Quisiéramos poder comprender que pasa por la mente y sobre todo de los corazones de estos 3 ex integrantes, quisiéramos entenderlos, no justificarlos, pero entenderlos para restaurar al menos en algo del respeto que alguna vez, con cariño, les tuvimos.
Se unieron a Macondo Producciones y a su dueño Alfredo Troncoso (de quien hemos hablado largamente en este espacio), y han llevado el nombre de Inti-Illimani por derroteros inesperados, realizando presentaciones que significan una verdadera falta de respeto para los seguidores del Inti.
No ensayan, se ven desanimados, discuten sobre el escenario, desafinan groseramente, se descuadran y se traicionan en sus principios (al menos Salinas lo hace) al incorporar arreglos permanentes (como un acordeón o piano) en temas emblemáticos sólo para dar cabida al hijo de Salinas.
Nada de lo que declaramos es un invento, hay registros, videos en que se da cuenta de lo que afirmamos.

Cuando se cumplen 5 años de aquel hito exitoso de Inti-Illimani en su propio país, recordamos con nostalgia esos tiempos en que la rectitud, la coherencia y sobre todo la decencia imperaban entre quienes habían formado parte alguna vez de Inti-Illimani.

Así como nuevamente declaramos nuestro firme reconocimiento a un único Inti-Illimani, que nunca dejó de tocar en 41 años de trayectoria, que tiene en su formación al único miembro fundador que no se alejó del grupo, que ha seguido sin interrupciones entregando su música, su poesía pero más aún su coherencia, su compromiso con las causas justas, que por sus integrantes, que cantan, tocan y crean, asegura la excelencia musical que caracterizó siempre al grupo, también declaramos nuestra fervorosa esperanza de que más temprano que tarde, la razón y la dignidad nuevamente imperen en las conductas (al menos de interés público) de quienes hoy, de manera irresponsable, dolosa y vergonzosa, usan y abusan del nombre del grupo del que alguna vez fueron parte, para que así los seguidores de siempre y los nuevos pero sobretodo los propios Intis, podamos seguir recorriendo el camino que ya está trazado y que tiene marcado a fuego el nombre de Inti-Illimani, el único Inti.

Este es el recuerdo de aquel entonces, de hace cinco años.





















Pronto otra entrega de la maravillosa entrevista a nuestro querido Jorge Coulón.

jueves, 19 de febrero de 2009

Inti a la Piedra

Ya es tradicional- En Valparaíso un lugar para un encuentro INTImo es La Piedra Feliz.
El Miércoles por la noche los dos conciertos programados estuvieron llenos de amigos que concurrieron alegres a un nuevo y cercano encuentro con Inti-Illimani, el único Inti.
A continuación el reportaje gráfico de este encuentro (gracias Carito).















lunes, 16 de febrero de 2009

Jorge Coulón. Tercera parte



continúa la respuesta anterior...

El gobierno de Frei padre, a pesar de haber llegado al poder con el apoyo de la derecha tradicional, fue un gobierno muy reformista, especialmente en el campo, donde marcó el ocaso de un sistema casi feudal de tenencia de la tierra que había condicionado fuertemente la gestión del poder en Chile, su composición social y ciertamente su cultura.
Las reformas (insuficientes para la izquierda, excesivas para la derecha) sumadas a las decenales luchas de la izquierda y los sindicatos obreros, despertaron en el país la conciencia de que era posible avanzar a un estado de cosas en que las aspiraciones de justicia, de igualdad y dignidad largamente acunadas por los más humildes podían ser satisfechas en el marco de una democracia que a pesar de su imperfección parecía bastante asentada en la cultura nacional.
No hay motor más poderoso que la esperanza y sobre esa fuerza se levantó la Unidad Popular hacia la victoria, en una elección donde los programas de Allende y del DC Radomiro Tomic eran muy similares, este es un detalle histórico (perdón por el término, aquí bien usado) importante porque cuando se pretende que Allende ganó con un tercio del electorado, se dice una verdad a medias o una media mentira, ya que el 60% del electorado votó por opciones de cambio bastante profundas.


EUI:
En 1967 y con toda la fuerza que ya desarrollaba la Nueva Canción Chilena, fundas junto a Pedro Yánez, Max Berrú, Horacio Durán, Oscar Guzmán y Ciro Retamal lo que hoy felizmente conocemos como Inti Illimani. Sabemos también que Lucho Cifuentes y Luis Espinoza tuvieron alguna participación en el origen del grupo y que finalmente Gloria Dávalos, la hermana del guitarrista Eulogio Dávalos, les propone el nombre que hoy lleva el grupo. Al respecto quisiéramos conocer tu relato, tus recuerdos de estos momentos, fundamentales para quienes hemos seguido a Inti Illimani hasta estos días.

Jorge:
Leí por ahí que no hay peor testimonio que el de los protagonistas, si se los considera como única fuente. Los seres humanos tendemos a una reconstrucción “mítica” de nuestra propia historia. En nuestra mente y memoria los sucesos toman un orden y adquieren prioridades que no siempre corresponden a los hechos como ocurrieron. Esto determina que cuando se hace necesario reconstruir un hecho, hay que recurrir a diferentes testimonios y al máximo de fuentes y documentos objetivos.
Por circunstancias desdichadas sucedió así con los orígenes de Inti Illimani, en realidad la historia del grupo es suficientemente rica como para que todos quienes han participado de ella ocupen el justo espacio, pero, entre la mala memoria y las medias verdades (que son la otra cara de las medias mentiras) estos orígenes se habían poblado de protagonistas inexistentes y se había injustamente omitido o subestimado algunos que, como todos, jugaron en su momento un rol fundamental, por breve que haya sido. Es el caso de Oscar Guzmán, quien estuvo ese 6 de Agosto en la fiesta de Bolivia (donde apareció el nombre Inti-Illimani) pero ya no estaba para la primera foto de que disponemos, en la mina La Disputada. Es el caso de la primera dirección musical del grupo que correspondió a Pedro Yáñez y que él justamente reivindica. Es el caso de Luis Espinoza, que a pesar de haber hecho parte de todos esos hitos fundacionales, hasta hace algunos años ni siquiera figuraba en las biografías del grupo. Pequeñas y grandes injusticias que se han ido aclarando gracias a documentos y testimonios cruzados.
Mis recuerdos están naturalmente ligados a mi experiencia personal, a mi relación con Max (desde 1965) con Horacio Duran y Pedro Yáñez en la peña de la UTE durante 1966 y con Ciro y Luis Espinoza durante ese mismo año en el grupo folklórico de la Escuela de Técnicos Industriales, esa es mi continuidad en la memoria. Recuerdo esos primeros meses de 1967 con Pedro, Horacio, Ciro, Oscar y Luis Espinoza… se nos unía frecuentemente Luis Cifuentes que no llegó a estar el famoso 6 de Agosto que nos dio nombre ni en aquella primera foto testimonial, donde sí estaba Max…
Mucho más importantes que esos recuerdos de notario, son mis recuerdos y sensaciones de la felicidad de descubrir, de cantar juntos, de - en buen chileno- huevear o hueviar juntos sin necesidad de tragos ni humos, de reír desmesuradamente de pasarlo increíblemente bien y creernos increíblemente importantes y absolutamente irremplazables…
Fueron tiempos de descubrimiento, de generosidad, de confianza, de intensos cambios, de belleza, de esperanza.


EUI:
Jorge, siempre hemos tenido la inquietud respecto del momento en que Inti Illimani entiende que tiene un camino, un futuro que recorrer lo que implica responsabilidades, sacrificios y por cierto una completa dedicación. Todos los integrantes de ese entonces, además eran estudiantes o estaban terminando sus estudios lo que eventualmente significaría comenzar la etapa del trabajo. De ahí surge la pregunta, ¿cómo, en qué contexto se toma la feliz decisión de privilegiar, por sobre todo, el desarrollo de este grupo que hoy ya tiene 41 años de existencia?

Jorge:
Corría el año 1971, todo a nuestro alrededor hervía, Max y yo estábamos ya trabajando en INDITECNOR (Instituto Nacional de Tecnología y Normalización) experiencia que merecería un capítulo aparte… habíamos tomado media jornada para poder dedicar tiempo al conjunto. Era el primer año de la UP, creo que fue el mejor porque las estrategias destinadas a derrocar a Allende estaban recién siendo estudiadas y se pondrían en práctica sólo hacia fines de ese año.
El caso es que vivíamos una situación de extrema actividad, felicidad y euforia, el grupo era cada vez más requerido desde distintas partes de Chile y todos sentíamos que teníamos flotando sobre nuestras cabezas la necesidad de tomar una decisión. En conversaciones con nuestro Rector Kirberg apareció la posibilidad de que la Universidad nos asegurara un sueldo mínimo que nos daría, especialmente a los que teníamos familia, una base como para dar el gran salto y transformar a Inti Illimani en nuestra fuente laboral.
La verdad es que no lo pensamos demasiado, la decisión nos costó una baja dolorosa, Ernesto Perez de Arce, quien por edad y autoridad musical jugaba un papel bastante central en el grupo. Ernesto decidió no seguirnos en la aventura, pero tuvo la mejor disposición para entendernos y para ofrecerse a preparar a su reemplazante en la quena y a continuar en el grupo hasta que éste estuviera en condiciones de volar con sus propias alas. Se produjo así el ingreso de José Seves y la partida de Ernesto.


EUI:
Inti Illimani es reconocido, junto a Quilapayún, como uno de los valores fundamentales en la difusión y soporte para todo lo que implicaba el proceso que se vivía bajo el gobierno del Presidente Allende. Hoy, vemos que también existen agrupaciones que de alguna manera se reconocen cercanos a los gobiernos de la concertación y que eventualmente se ven favorecidos con ayuda. Sabemos que Inti Illimani ha participado de iniciativas del Ministerio de Cultura del actual gobierno por ejemplo. En la perspectiva del tiempo ¿qué diferencias existen entre el compromiso que Inti Illimani mantenía con su apoyo voluntario y público al gobierno del Presidente Allende con la participación que eventualmente hoy ha tenido de algunas iniciativas asociadas a la administración del actual gobierno?

Jorge:
La diferencia que va de la pasión a la razón. Fuimos apasionadamente allendistas, somos racionalmente antiderechistas y racionalmente trabajamos para que quienes gobernaron con Pinochet, aquellos que quieren heredar sus bienes pero no su nombre, no regresen al gobierno por la vía electoral. Trabajamos porque el eje cultural y político de Chile se desplace hacia las ideas progresistas y aísle a los sectores antidemocráticos, depredadores, militaristas, fascistas, racistas, machistas, intolerantes, etc.
Inti Illimani es un grupo identificado con la izquierda, antes y ahora, lo ha demostrado suficientemente; nuestra causa es la justicia social, el progreso, la democracia verdadera.
De todas maneras aquí quisiera responder a título estrictamente personal, por respeto a la autonomía que todos tenemos en el grupo respecto de nuestras convicciones políticas o religiosas. Estoy seguro que todos comparten, en general, mis posiciones, pero prefiero comprometer en este terreno sólo mi opinión personal, por respeto a mis compañeros y a la democracia interna del grupo.
La Concertación, en mi opinión, representó durante 16 o 17 años la única alternativa real al pinochetismo que sobrevivió con mucha fuerza a la dictadura. A pesar de que no creo que toda la gente que vota y apoya a la derecha sea estructural y culturalmente antidemocrática, así como hay sectores políticamente de derecha, pero no necesariamente antidemocráticos, no cabe duda que hasta la elección presidencial pasada quienes llevaron la batuta y el control de ese sector fueron las fuerzas más integralistas de la extrema derecha. En esas circunstancias, creo, un triunfo de la derecha con Lavín (más allá de un cuestión de nombres o personas; todo el mundo tiene derecho a sus opiniones y a ser respetado como persona y como ciudadano) habría sido entregar Chile a una grave involución cultural, política e institucional. Habría significado llevar al gobierno, con pleno control del sector, a lo más granado del integralismo católico mundial, a fuerzas ligadas a las mismas redes que mantuvieron en pié las peores dictaduras de la era moderna. Habría significado mucho más que perder el cobre y lo poco que queda de Estado; habría significado en su momento un vuelco integralista con consecuencias para todo el continente… quien sabe si la expectante situación de las fuerzas progresistas en toda Latinoamérica habría sido posible en esas circunstancias.
Frente a esa amenaza muy concreta para la vida democrática chilena, la galaxia de la izquierda no lograba cuajar una identidad, un proyecto posible y creíble, se debatía entre un sector que perdía cada vez más identidad al interior de la Concertación (PS y parte del PPD) y un sector que no lograba salir de los graves traumas heredados de la dictadura, logrando un apoyo más o menos constante de un 5% en cada elección.
En esas circunstancias, creo que lo razonable fue trabajar pacientemente, con los dientes apretados, por tratar de parar a la derecha, impedirle llegar al gobierno y a la vez fortalecer la idea de la democracia y reconstruir una izquierda posible, no sólo una izquierda éticamente impecable (que nunca dejó de existir) sino una izquierda políticamente gravitante y condicionante de la vida nacional.
En el camino, que ha sido largo, fueron sucediendo cosas, madurando situaciones, anquilosándose unas, destrabándose otras. La irrupción de dos candidaturas de derecha en la última elección presidencial evidenció una derecha diferente a la de los años pasados, el hecho de que haya sido Piñera y no Lavín quien pasó a segunda vuelta (insisto, más allá de los nombres y los personajes) le cambió completamente el panorama al país y a la derecha misma, ya no son los integralistas los que hegemonizan completamente el sector, esa minoría política y culturalmente extremista se transforma también en minoría electoral (hay que notar que ese aislamiento se continúa produciendo incluso al interior de la UDI, donde se evidencian hoy sectores integralistas que antes no aparecían, que actuaban en las sombras…)
Paralelamente la Concertación, lamentablemente bajo el gobierno de una mujer respetada y respetable por su historia personal y política, completa un ciclo, al parecer fatal, de pérdida de identidades en su interior y constitución de una confusa identidad transversal de sus componentes.
Las sociedades modernas necesitan de las coaliciones para ser gobernadas, especialmente Chile, donde los tres tercios electorales que expresan su cultura social y política parecen inalterables en el tiempo y la historia. Pero gobernar en coalición implica una fortaleza en la identidad de los aliados, en Chile veinte años de Concertación y de amenaza de una alternativa de extrema derecha han llevado a una total pérdida de identidad por parte del componente de izquierda de la coalición y a una inaceptable exclusión de una parte fundamental de la izquierda del sistema político y de la representación parlamentaria.

Chile no resiste otro período de esta coalición agotada, poco creíble y patéticamente aferrada al poder. Al mismo tiempo debemos constatar que las condiciones de hoy no son las del 2000, ni siquiera las del 2005 la amenaza derechista sin dejar de existir es de otras características y la izquierda tiene nuevas posibilidades de articularse y constituir un interlocutor válido, activo y creíble en una nueva propuesta de futuro para Chile… ¿volveremos a vivir la pasión de la UP y Allende? No sé, tal vez yo no, pero se lo deseo vivamente a mis hijos o nietos y a sus coetáneos…


EUI:
Jorge, cuéntanos de la Nueva Canción. Tu cercanía y colaboración con Víctor Jara, con Violeta Parra, en fin con tantos o con todos quienes de alguna manera compartían una voluntad, un pensamiento en aquel entonces.

Jorge:
A Violeta Parra la conocí sólo como público. Despertaba en mi una enorme curiosidad y no me perdía sus actuaciones en la Feria de Artes Plásticas en el Parque Forestal, también pasaba por su stand donde vendía sus cuadros y arpilleras… yo venía de un mundo tan diferente!!
A Víctor, sin embargo lo conocí personalmente en los tempranos años 60 en casa de Amaya Clunes, ella era escenógrafa del ITUCH, Teatro Experimental de la U de Chile y amiga de Víctor. En algún cumpleaños o reunión social en casa de estas primas (Amaya y Gloria eran parte de nuestra ampliada y genérica familia, su madre Josefina Gutierrez era hermana de mi padrino. Su padre Alfonso Clunes merecería un capítulo aparte que ojalá alguien escriba algún día) tuve oportunidad de ver a Víctor y a Rolando Alarcón, siendo yo bastante menor… nos encontraríamos más tarde en circunstancias muy diferentes.
La Nueva Canción Chilena fue el nombre que Ricardo García dio a algo que estaba sucediendo en la música chilena y que los medios oficiales, radio y prensa principalmente, no registraban.
Desde la década de los 50 se había venido desarrollando una fuerte actividad musical ligada a los sindicatos y a la izquierda, muy en particular al gremio de los profesores normalistas. Sin ser testigo de ese proceso germinal creo reconocer allí las primeras actividades ligadas a la música campesina de la zona central.
No quisiera entrar en detalles de una época que no viví como testigo directo, pero alcancé a vislumbra una raíz que lleva a Violeta Parra, Margot Loyola, Cuncumén, René Largo Farías y muchos otros que cultivaban la música de los chilenos que vivían el campo desde otra óptica que la del “agüita de mi tierra…” a mediados de los 60 Chile cayó en la fiebre de un grupo nacido tras la huella y la inspiración de Los Trovadores de Norte de Argentina… ese grupo se llamó Los Cuatro Cuartos y tuvo un éxito arrollador. A su alero creció un estilo y casi un movimiento que se conoció con el contradictorio nombre de “Neofolklor” a ese cometa fugaz debemos agradecer la aparición en los medios de algo del iceberg alternativo. Rolando Alarcón, un poco del equipo de Chile Rie y Canta, programa de radio y propuesta musical y cultural que vivía bajo el alero generoso y amplio de René Largo. También significó la irrupción de un creador fogoso y cargado de poesía de la buena, Patricio Manns. Trajo la figuración de Angel e Isabel Parra, del mismo Alarcón, etc. Fue un veranito de San Juan que puso en los oídos de muchos chilenos inquietudes melódicas y rítmicas que se fueron a potenciar con otras inquietudes relacionadas con la identidad, la riqueza musical y poética, inquietudes culturales y sociales que buscaban propuestas y respuestas.
Algunas de estas propuestas y respuestas aparecieron ya en 1965 con Quilapayún y Víctor Jara, una dupla que cambiaría muchas cosas, que echaría a rodar una bola de nieve destinada a ser un alud y que el atento Ricardo García bautizó con el nombre de La Nueva Canción Chilena.


EUI:
Respecto de la pregunta anterior, ¿cómo asumes y cómo te afecta la pérdida de Violeta y en particular de Víctor? Sobre este último ¿recuerdas como te enteras de su muerte?

Jorge:
Son dos pérdidas completamente diferentes. Con Violeta Parra muere, suicida, un referente muy fuerte, pero lejano en lo personal. La muerte de Violeta fue, para mi, un golpe importante. A los 19 años es difícil entender el suicidio. Ese febrero de 1967 estaba en el sur, cerca de Victoria cuando escuché la noticia y recuerdo que inexplicablemente me sentí culpable… ¿qué hicimos mal? Me pregunté… bueno, el suicidio conlleva esa carga de castigo hacia los demás, tiene eso de ilegítimo… el hecho de que no es sólo una decisión personal de acabar con la propia vida… los invisibles lazos del afecto nos hacen ser parte de los demás y matarse implica, se quiera o no se quiera, matar algo en el organismo social.
Cuando, al regreso de las vacaciones nos juntamos en casa de Horacio Durán a escuchar el disco de las últimas composiciones de Violeta tuvimos una sensación de maravilla, por lo que escuchamos y de dimensión de la enorme pérdida que habíamos sufrido, como personas, como país, como especie.
En el caso de Víctor mi compromiso emotivo y personal era muy distinto, Víctor era un amigo y su muerte resumía y simbolizaba muchas muertes, la noticia llegó en medio de un torrente de noticias terribles… supimos de ella en casa de Peter Reckman en Holanda y durante muchos días mi subconsciente se negaba a procesar esa noticia devastadora… incluso meses y años más tarde soñaba que Víctor aparecía en un concierto, feliz, con su sonrisa desplegada. Con Víctor trabajamos mucho tiempo juntos, era mi vecino de barrio… sé que compartimos momentos de alegría, de tristeza, de tensión, incluso de mucho enojo (recuerdo un feo episodio con el diario La Tribuna, que bastaría para retratar la indecente maquinaria comunicacional que se montó contra la UP) pero cuando vuelve a mi memoria está siempre sonriendo. La increíble sonrisa de Víctor.


EUI:
El exilio.
No queremos entrar en los detalles obvios de este trance doloroso. Conocemos las circunstancias que producen esta “vacaciones tan largas como obligadas”. Sin embargo, también sabemos que ese tiempo vivido marcó positivamente a los Intis y sus familias. En esa perspectiva ¿Cómo contribuyó para tu crecimiento personal el vivir en el viejo mundo, aprender a amar una nueva cultura, un nuevo idioma, nuevos amigos? ¿Qué relación tienes hoy con Italia? ¿Qué tiene hoy Jorge Coulon que no hubiese tenido de no vivir esos años en Europa?


Jorge:
Hay que decir que nunca el exilio es una experiencia positiva. Por algo los antiguos griegos lo comparaban a la muerte. De hecho Sócrates prefirió la muerte al exilio, como también lo hizo Salvador Allende, en circunstancias muy diferentes, pero de similar y profunda nobleza.
El exilio es tremendamente cruel, tal vez sus acepciones de destierro, desarraigo o extrañamiento lo definan más directamente; privar de su tierra, cortar raíces, transformar en extraño.
No quisiera entrar en detalles que se puedan confundir con victimismo o autocompasión, mucha gente sufrió demasiado en Chile y hay muchos que tuvieron como destino final el destierro, pero antes conocieron la prisión, la tortura, la persecución.
No sé si haya una pena comparable y una crueldad más refinada que la desaparición de ciudadanos programada desde el estado. No sé si haya una historia más miserable y degradante para quienes la pusieron en práctica que el tráfico de restos que siguió a la cobardía de los asesinatos. Una institución militar que dedicó personal, recursos y logística a asesinar y hacer desaparecer ciudadanos del país cuya integridad juraron defender, y que no contenta con aquello, continuó en los años y decenios siguientes desenterrando, ocultando y escondiendo esos pobres restos que los acusaban, está en una relación muy enferma con la ciudadanía. Es inútil que se pretenda otra cosa o que se quiera hacer creer que las responsabilidades fueron solamente individuales. El Chile amargo y violento de hoy, el Chile desconfiado e individualista que tenemos, el Chile chabacano, frívolo y superficial que nos entregan los medios, el Chile asustado, prisionero del miedo… es hijo de esta esquizofrenia no curada adecuadamente, no tratada como tal. El Chile que vemos esconde un Chile doloroso y reprimido que asoma a cada rato y que no somos capaces de entender.
Bueno, volvamos a la pregunta, yo conocí el exilio, puedo dar testimonio de esa crueldad y tratar de entender a los que sufrieron las otras; esto último lo hago desde la solidaridad humana, lo anterior desde la experiencia personal.
Muchas veces conversamos acerca de la necesidad de escribir un pequeño manual del exilio, un vademecum que le ahorrara a los futuros exilados una serie de etapas entre ridículas, grotescas y dolorosas, pero la característica fundamental del desterrado es pensar que su caso es único, que su experiencia es inédita y como, por otra parte, nadie vive de las experiencias ajenas, este práctico manual no ha visto la luz de las vitrinas. Tal vez un día ese proyecto, como otros relacionados con nuestra historia, se concreten, mientras tanto puede servir una breve y cariñosa tipificación del exilado.
Hay muchas formas de enfrentar el exilio y de esas formas depende el daño o el provecho que se pueda obtener de una situación ya definida como trágica. El exilio es como un transplante de órgano, donde los mecanismos de defensa del organismo que recibe el órgano y los del órgano mismo se ponen en marcha, es muy diferente la llegada de un exilado (o de pocos) a un país, que la llegada de muchos exilados… En el caso de un exilado, el organismo receptor lo absorberá con mucha facilidad, nada de su cotidianeidad se verá alterado ni amenazado en su rutina, la respuesta del organismo receptor será de curiosidad, de interés y de acogida. La adaptación y, eventualmente la absorción dependerán del recién llegado.
Diferente situación produce la llegada masiva o importante de desterrados, éstos tienden a agruparse en un microcosmos en el que tratan inútilmente de recrear las condiciones del país que los desterró, recurriendo a veces a la negación y al rechazo del medio que los recibe, a su vez éste se articula en distintas reacciones, actúan la curiosidad, la identificación, la solidaridad, pero también los temores atávicos a lo diferente, el rechazo al “diverso”, el temor en los estamentos más débiles de que los nuevos arribados los desplacen en la escala social, los priven de oportunidades. Existe también la reacción neta y abiertamente racista y el encontrar en el recién llegado el chivo expiatorio para todas sus frustraciones y fracasos… Las combinaciones son muchas y los casos muy variados de país a país. Hay países, como Australia o Canadá que por su poca población y mucho territorio, por su misma característica de una identidad nacional en formación, han desarrollado una institucionalidad y una cultura de recepción de contingentes migratorios, en los países de ese tipo los exilados han tendido a identificarse con los emigrantes y su adaptación a esos medios multi étnicos y multiculturales ha sido más fácil. Muy distinto es el caso donde el exceso de población en territorios relativamente pequeños, unido a fuertes identidades locales hace vivir el transplante en modo mucho más traumático.
Nosotros decidimos, conscientemente, vivir nuestro exilio con las ventanas abiertas, con curiosidad y respeto por el país que nos acogió de manera increíblemente solidaria. Creo que eso fue determinante, por lo menos en mi caso personal, para que los quince años de mi vida que pasé en Italia, entre los 25 y los cuarenta años, fueran muy formativos y provechosos. Es cierto que esa edad es bastante fundamental en la vida de una persona, me hice un humano adulto en Italia, tres de mis hijos nacieron allá y una hija que no alcanzó a caminar esas calles reposa en un cementerio romano… esas cosas son demasiado importantes, nunca tuve la menor duda acerca de mi deseo y necesidad de regresar a Chile, pero tendría que ser muy insensible o canalla como para desconocer el reconocimiento profundo, el amor profundo que siento por Italia, a veces creo que mi corazón es chileno y mi cabeza italiana, pero no sería justo con mi corazón ni con mi cabeza ni con Chile ni con Italia… mi intelecto y mis sentimientos son bastante binacionales, biculturales, biterritoriales… eso si, soy y me siento chileno, pero con este tremendo bonus track.
Esta doble nacionalidad sentimental e intelectual me reafirma en mi convicción de que el ser humano es el mismo en todo el planeta, las benditas diferencias, que debemos cuidar, no deben hacernos olvidar lo iguales que somos, lo iguales que deberíamos ser. El racismo es una bestia complicada que habita nuestros rincones animales más tenebrosos.
No sé si tenga sentido hipotizar qué habría sido de mi sin el exilio en Italia… ya fue, ya fui, ya soy.


En este ejercicio hermoso de preguntar y de esperar respuesta, hemos descubierto muchas cosas de quienes ya forman parte de este espacio.
Desde la primera entrevista creimos estar más cerca de ideas y corazones que de personajes.
Esta vez no es distinto, al contrario.
Leer el relato de quien consideramos y queremos profunda y sinceramente puede llevarnos a un entusiasmo que puede parecer desmedido pero del cual no nos arrepentimos.
Jorge Coulón ha sido la voz que nos representa, que escuchamos y que queremos escuchar.
Pronto la cuarta parte de esta entrevisa.

martes, 10 de febrero de 2009

Entrevista a Jorge Coulón. Parte II

La sorpresiva y triste pérdida de Jorge Guerra nos hace necesariamente reflexionar.

¿Seguiremos en este andar indolente, mezquino y urgente que nos lleva a pasar por alto el reconocimiento concreto a quienes declaramos admirar? ¿seguiremos así, como sociedad, permitiendo que cuando se nos vayan los seres queridos, nos lamentemos por ser demasiado tarde?.

Fírmemente creemos que no.

La serie de entrevistas que se han publicado en esta tribuna, no sólo han tenido el propósito de acercar aún más a las personas entrevistadas a sus seguidores y admiradores, también han sido una forma de manifestar nuestro profundo reconocimiento a su obra, a su vida.

Creemos necesario el homenaje que sin lugar a dudas merecen quienes han dado ejemplo. A quienes seguimos, a quienes admiramos, en definitiva a quienes queremos.

Este es el turno de uno de los grandes y que con cándida pretensión quisiéramos, no se vaya nunca.



EUI:
Los Nubarrones.
Cuéntanos como surge el conjunto Los Nubarrones, quienes lo componen y en que ámbitos se desarrolla la existencia del grupo (sus influencias, presentaciones, etc).

Jorge:
Heredamos del Fauno la idea de hacer grupos, junto a Fernando, mi primo de Los Tecolotes, crecimos cantando a dos voces hasta que la pubertad nos obligó a la pausa que impone el cambio de voz. De regreso de ese tiempo terrible, en que en tan poco tiempo nuestro cuerpo sufre una transformación digna de Mr Hyde, volvimos a cantar juntos , esta vez en medio de la fiebre de zambas y chacareras, a poco andar, el año 65, apareció en las tertulias de la calle Clemente Fabres la figura de Max, también hacía parte de los innumerables primos y amigos que llegaban a mi casa el entrañable Willy Oddo y Carlos Guzman, primo en la acepción que la gente del sur da a los coetáneos de familias muy cercanas (tal vez de ahí venga la costumbre, más reciente, de llamar tío o tía a cuanto adulto se aparece en el camino).
Los Nubarrones fue el resultado de esos encuentros y las ganas que teníamos de hacer un grupo, estuvo formado en un principio por Fernando, Carlos, Max y yo, participamos en algunos festivales donde comenzaban a aparecer personajes como Florcita Motuda (que tenía un normalísimo grupo de rock pero que ya mostraba originalidad y talento). A poco andar Willy tomo el lugar de Fernando y participó de la etapa más exitosa del cuarteto que nos llevó por distintos escenarios e innumerables asados con nuestro repertorio de tonadas y zambas de las que Willy era un extraordinario cultor… debo agregar que la simpatía personal de Carlos, Willy y Max eran un capital incalculable de este grupo que entre chistes, canciones y conversa podía animar un evento de duración indefinida, pero que no bajaba de las seis de la madrugada.
Caminando con Willy en las noches veraniegas, en las que Santiago se transforma en una ciudad amable y única, nos acompañábamos dos y tres veces a la puerta de la casa del otro, entre Clemente Fabres y la plaza de los aburridos, proyectando una dimensión instrumental del grupo basada en instrumentos como el charango, la quena, etc. Un día nos encontramos en la UTE y me dice… el grupo que estábamos pensando ya existe y son extraordinarios, los escuché anoche en el Pedagógico de la U… se llama Quilapayún…
El año siguiente, 1966, Willy pasaría a ser parte de los Quila.


EUI:
Santiago.
Cualquiera que haya crecido en provincia, sabe que el traslado “forzado” a la capital conlleva costos y eventualmente ventajas. ¿Cómo recuerdas ese proceso, la forma en que se les comunica la decisión del traslado y los comienzos de una nueva vida capitalina?.

Jorge:
Yo era un niño chico cuando mis padres se trasladaron a Santiago, incluso durante ese traslado pasé un tiempo largo (varios meses) con mi abuela, la Guaña, en Victoria, sin saber mucho cómo ni porqué aparecí en Santiago en una pensión del barrio Brasil, calculo que en marzo o abril del año 1952 porque aparte del asombroso choque con una ciudad enorme y con abundancia de letreros luminosos (en Victoria ya había pasado horas extasiado con el neón de la Ferretería El Aguila, el único del pueblo) por la Alameda, cercana a la pensión, pasaban los desfiles políticos de los distintos candidatos a la presidencia. Nuestro candidato era, naturalmente, el radical Pedro Enrique Alfonso (del que me llamaba la atención que no tuviera apellido) quien, para gran sorpresa y desazón de mi padre perdió frente a Carlos Ibáñez, iniciando un largo período en el que el Papo no volvió a saber de triunfos electorales. También participó en esa elección por primera vez Salvador Allende, pero debo reconocer que mis recuerdos del Chicho comienzan con la elección del año 58.
Del barrio Brasil nos trasladamos a una casa en San Miguel, en la calle Llico. De esa casa tengo recuerdos ligados al incendio de los pastizales de una plaza cercana y al tráfico de ladrones por el patio de la casa durante las noches, situación que llevó al Papo a conseguir una pistola que llegado el momento –afortunadamente- no funcionó, lo que desvió inmediatamente su atención, pasando del atávico instinto de defender su guarida y su familia a su más asentada curiosidad mecánica, con el ladrón todavía manos arriba se puso a desarmar la pistola para detectar la falla, alegando contra el colega que se la había prestado…
Un robo de proporciones mayores mientras pasábamos las vacaciones en el sur, convenció al Papo de buscar casa en otro barrio y así llegamos el año 1954 a la calle Miguel Claro a pocas cuadras de la que sería La Casa familiar en calle Clemente Fabres, premonitoriamente ubicada a pocos metros de la embajada italiana.De todas maneras en calle Miguel Claro dejamos los fantasmas de mi bisabuela, la A, y de mi primo Iván Larrañaga fallecido en trágicas circunstancias … creo que la importancia familiar de las casas pasa no sólo por el hecho de nacer o habitar, también morir en ellas es un acto de soberanía familiar.


EUI:
Ingresas a la EAO (Escuela de Artes y Oficios). Cuéntanos Jorge que era la EAO y como te desarrollas académicamente en ese entonces.

Jorge:
La EAO es una institución más que centenaria (se fundó en 1849).
Yo ingresé en 1960 a la edad de 12 años y por iniciativa de mi padre que veía en mi (tal vez porque llevábamos el mismo nombre, aunque yo no era el mayor de los hermanos) su continuador en las aulas de la que había sido también su escuela.
Para mi fue una sorpresa que se decidiera mi ingreso a la EAO, mis inclinaciones claramente estaban orientadas a las disciplinas humanistas, era de niño un gran lector y mi interés por la música era evidente… tal vez esas señales llevaron al Papo a la conclusión que yo debía hacerme hombre en la enseñanza industrial y alejarme un ambiente tan poblado de peligrosas tentaciones para un preadolescente nacional.
Curiosamente, y por contraste, la Escuela fue un gran ambiente para desarrollar mis inquietudes artísticas e intelectuales, estas inquietudes no eran masivas entre los estudiantes, pero quienes las teníamos encontramos mucho apoyo entre algunos profesores y sobre todo entre los compañeros que nos miraban como bichos raros, pero valiosos y necesarios.
Mi relación con el aspecto académico de la Escuela, fue un crescendo de interés y luego pasión, comencé sin tener ningún interés especial en el saber tecnológico y cuando terminé la EAO y dí el Bachillerato Industrial, estaba embarcado de lleno en actividades artísticas, me gustaba la ciencia y la tecnología. Luego vino la Universidad, la inmortal Técnica del Estado (UTE) y el creciente conflicto que se resolvería a favor de la música, pero que me dejó cojo de una parte que ya me apasionaba, la ingeniería, la física, la termodinámica, la electrotecnia, también terminó mi relación con la enseñanza de esas materias… me gustaba mucho hacer clases.


EUI:
Ya en ese entonces se vivía en Chile un movimiento incipiente que daría origen a la Unidad Popular. Por obvio que parezca, ¿qué te motiva a tomar partido, a involucrarte en este movimiento? ¿cómo se vivía el Chile de ese entonces desde la mirada de un joven Jorge?.

Jorge:
En realidad es justo decir que la Unidad Popular se venía gestando desde hace mucho tiempo, no se puede hablar de un movimiento incipiente en los años 60, no olvidemos que Allende perdió por muy pocos votos (alrededor de 30.000) la elección con Alessandri en el año 1958 y podría haber ganado ya en el 64 si la derecha no se hubiera abstenido de presentar candidato y apoyado a Eduardo Frei.
La fuerza de la izquierda es parte de la historia de Chile.
Yo comencé a interesarme en política a poco de llegar a la EAO, ya el año 62 (* fue el 61) se inició en todas las sedes de la UTE un profundo movimiento por la modernización y el mejoramiento de la infraestructura y la docencia. Este movimiento, que implicó la ocupación de las escuelas por largas semanas y que terminó con un rotundo triunfo del movimiento estudiantil (creo que allí está el comienzo de la reforma universitaria en Chile), fue una ocasión de mucha discusión y debate, no solamente acerca de la situación de la enseñanza industrial y técnica, sino acerca de la realidad del país.
Para las elecciones del año 64 yo tenía 16 años, pero participé bastante en la campaña de Allende y fui presidente del FRAP (Frente de Acción Popular, el antecedente de la UP) de la Escuela. Frei, con el apoyo de la derecha ganó por amplio margen, dejando en claro desde ese entonces los famosos tres tercios en que se divide el electorado nacional.
La derrota de Allende, y la situación de América Latina, llevó a muchos jóvenes a optar, al menos en las palabras, por movimientos que planteaban como única salida el abatimiento del poder por la fuerza. Sin embargo la gran mayoría, por lo menos en el entorno de la EAO-UTE estimábamos que para Chile el único camino posible era el fortalecimiento de la opción democrática, organización popular, sumar fuerzas y sectores en torno a un programa que favoreciera a la gran mayoría de los chilenos.
Yo pensé, tras la derrota del 64 en ingresar al PS, era el partido de Allende, pero poco a poco en el contacto permanente y el trabajo en la Universidad, me fui acercando a la Jota aunque mi ingreso oficial se produjo recién en 1968.Los cinco años que van del 65 al 70 fueron de una intensidad política y existencial increíble, incluso restando de la cuenta el hecho de que, en mi caso personal, fueron de mis 17 a mis 22 años, edad de por si intensa. Parecía que éramos una generación destinada sólo a triunfar, sólo a crecer… parecía que los vectores del tiempo y el progreso se habían convertido en uno solo y que su dirección no podía más que avanzar.


(*aportes de Luis Cifuentes Seves)

Esta entrevista se desarrolla incluso por estos días. En nuestra próxima entrega Jorge nos habla de los inicios del Inti, del camino elegido.

El Unico Inti, firme junto a Inti-Illimani.


Version in english


EUI:
Los Nubarrones
Tell us about the Los Nubarrones, whose are the members in this band, how do they work together (What are their influences, etc)

Jorge:
The whole making groups idea was from Fauno, joined with Fernando my cousing from Los Tecolotes, we grown up singing in two voices until puberty came along and we changed our voices naturally. At that horrible time, when our body changed in a speciall Mr Hyde way, we sang toghether again, now we were in the middle of zambas y chacareras, after a while, in 1965 the figure of Max showed up at the talks we used to have at Clemente Febres st. Also Willy Oddo and Carlos Guzman were part of the people, cousings and friends that came to my place, I sayd cousing refering to the name that people at the South gives to everyone whose in some way is related (maybe calling to every adult person on the way Aunt and Uncle comes from there too).
Los Nubarrones was what came from those meetings at home and of course we really wanted to created a group too. At the begining the members were Fernando, Carlos, Max and myself. We participated at some Festivals where characters like Florcita Motuda started to show ( he had a totally normal rock band but you can see naturally the great talent). A little bit later Willy took the place of Fernando and participated in the most successful part of our carrear as a band, we were in several kinds of Shows and barbacues of course… I most say that the personal sympathy of Carlos, Willy and Max where a huge part of the successful of the band, they could, with no problems at all, entertain, in the middle of jokes and songs, in every party for longer than six in the morning. Talking a walk in a summer night, where Santiago became a friendly an unique city, we used walk together to our doors, between Clemente Febres st and “la plaza de los aburridos” (boring people Square) thinking on a instrumental dimension of the group, based on instruments such as charango, quena, etc. And one day we met at the UTE and he told me… The Group we were thinging to create is already done and they are extraordinary, they are named Quilapayún…
The year after that, 1966 Willy was a member of Quilapayún.


EUI:
Santiago.
Everyone whose have been living in a town kows that being taken to live in a City it has of sweet and bitter. How do you remaind that change and the first days living in Santiago?

Jorge:
I was a little boy when my parents moved to Santiago. I even remember I spent lots of days (months) living with my grandmother, la Guaña, in Victoria Town, I didn´t realize how and why, one day I was living in a place located on Brasil street. I think that was in March or April, 1952 because part of the crush of moving into a huge city full of Neon advertasing (living in Victoria I was starring for hours at a neon advertasing of “El Aguila” a hardware store, that was the only one neon advertasing in the town) there usually was a parade, along the Alameda st near to the place where we lived, of the presidential candidates from different political parties. Our candidate naturally was from the Radical partie, Pedro Enrique Alfonso (a weird thing of him was that he has no last name) who lost the elections against Carlos Ibáñez, under the surprising look in my Father´s face and starting a long time where el Papo didn´t know a thing about winning elections. Salvador Allende run on that elections for the time too, but I must say that my memories about “el Chicho” started with the elections of 1958. From the neighborhood in Brasil st we moved on to San Miguel, in Llico st. From that place I remember this fire of weeds in a park near from us and I also remember thieves running away for our back yard at nights, because of this last thing el Papo decided to get a gun for his own, fortunally when the time to use it came, the gun didn´t work so he dramatically went to the feeling of deffending his family and his home to the need to find out the mechanical explanation for that gun broken so with a guy with his hands in the air he started to solved this situation… Later when we were spending some days of vacations at the south we were stoleen from our house so then el Papo decided to find a house in another place and that´s how we got to live in Miguel Claro st from a few blocks of what would it be La Casa in Clemente Fabres st which was near, almost coincidentally, from the Italian Embassy.
Anyway, we left the ghost of my greatgrandmother at the house in Miguel Claro st, the A and of my cousing dead in tragic circunstances… I think that the importante of the houses wheere we lived it has to do with the fact of not just borned and living at them but to die on them.


EUI:
You got at the EAO (Arts and Offices School) Tell us how it was the EAO and how were you doing it as an student back there.

Jorge:
The EAO is older than 100 years, in fact it was created in 1849.
I was 12 years old and I got in there in 1960 and because my Father wanted me to go on teaching in the very same place where he studied at. (maybe because we had the same name, even when it wasn´t me the oldest brother).
To me was surprising that they decided to get me in because I was more interested in the humanist side, I was quite a reader since I was a kid and of course I was interested in music too… Maybe that was what led “Al Papo” to the conclusión of made of me a man in the EAO and take me away from that area full of dangerous temptations for a teenager.
Curiously, and away from that idea, the School was quite a place to let myself get away with the idea of being an artist, this wasn´t a feeling that most of the students agree with but whose felt in that way found in the teachers support, even in our classmates whose gave us weird looks but I guess they also thought of us as beings with a value.
My pasion and interest about the subjects at School were getting bigger When I got there for the first time I had no particular interest at all but by the time I finished studies I was spending lot of time in arts and I also liked science and technology.
Then came the inmortal UTE and an internal fight that music won but it let me lame in one leg because I was really interested in what I studied and I liked teaching very much too.


EUI:
Back in that time there was a movement from where came Popular Unit. What moved you to get envolved in that movement? How was living in Chile from your young eyes?

Jorge:
I must say that the Popular Unit was something borned a long time before than the 60´s, In fact, Allende ran against Alessandri in the elections for President in 1958 and he lost for less than 30.000 votes but in 1964 he could have won but the opposition didn´t want to present a candidate and support to Eduardo Frei.
The power of the “left side” is part of the Chilean History.
I started to get envolved in politic almost when I just got in the EAO. In 1961 they made for the first time and ever a movement to improve the infrastructure and at the teaching practices. This movement ocuppied the schools for long weeks after which the students won importance and changes for they own good. Those were times of discussión and debate and not just about students issues but also about what was going on in the whole country.
At the elections in 1964 I was 16 years old and I participated in his compaign and I also was the President of the FRAP at school(Popular action movement, this was before the UP). Helped by the Right, he won easy and we saw perfectly clear how the nacional electorate is divided.
Because of the defeat of Allende plus the situation lived in Latin America many young people started to decidede, at least in words, getting part of the movements which proposed as an unique alternative to reforced the democracy by popular organization to create a program to help to the most Chilens and specially in chile we felt that way.
I though, after loosing the elections in 1964, to got in the PS party, that was the party of Allende, but later and working daily I was getting closer to the job in the Jota even when I officially got into in 1968.
The five years between 1965 and 1970 were intense political and existential, even if we consider that in my very own experience I was from 17 to 22 years old, ages pretty intense in their own. It was like we were intended to succeed and get grown… It was like vectors of time and progress were only one and they could only go by.
Frei´s goverment was very reformer, specially considering that it was supported by the Right, there was the end of the “feudal” system which by the power of the owners of land the political system was afeccted and also the social composition and certainly the culture too.
Reforms (insufficient to the Left and excessive to the Right) plus the tens of fight of the Left and of the labor unions, lifted the country thinking that it was possible to create a system based in the justice, equality and dignity support for the Democracy, which despite its imperfections was pretty based on nacional culture.
There is no more powerful engine than hope and over this power the Popular Unity was lifted to the victory in an elections where the political programs of Allende and Radomiro Tomic were very alike, this is an historical retail (I am sorry for the term, here is well done) very important because when they said tha Allende won the elections by the one third of the electorate, they said a half- truth or half-lie, because 60% of the total electorate indeed vote for options of deeply changes.

sábado, 7 de febrero de 2009

ADIÓS PIN PON




Con profunda tristeza, nos adherimos a las muestras de dolor y pesar por el sensible fallecimiento de Jorge Guerra, destacado actor nacional, quien diera vida al personaje infantil de Pin Pon, el cual llenó muchas horas de sana entretención en la vida de los chilenos.

Además, Jorge fue un destacado hombre del arte, que se caracterizó por su consecuencia, su bondad, su amor, y su legado es el mejor recuerdo que tendremos de él.
Para su familia, un abrazo y el consuelo profundo que jamás lo olvidaremos.
Gracias Pin Pon, y hasta siempre.

 
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